Los Yankees de Nueva York volvieron a tropezar en la búsqueda del sueño de octubre. Esta vez, fueron los Blue Jays de Toronto quienes con una contundente victoria 5-2 selló su eliminación en la Serie Divisional de la Liga Americana.
El Bronx amaneció en silencio. Las luces del Yankee Stadium se apagaron y el eco de la frustración se mezcló con las preguntas sobre el futuro del manager Aaron Boone y la dirección deportiva del equipo. Ni Aaron Judge ni el poder de su ofensiva pudieron con la novena canadiense.
Toronto, liderado por Vladimir Guerrero Jr. y un bullpen impecable, jugó con temple y energía. Mientras ellos celebraban su pase al Campeonato de la Liga Americana, los Yankees quedaban atrapados en un ciclo de decepciones que ya preocupa a su afición: talento hay, resultados no.
La era del poder sin gloria continúa en el Bronx. Y cada derrota pesa más cuando se lleva el apellido Yankees.