La tarde de este miércoles, una pipa de gas explotó en el cruce del Puente de la Concordia y Calzada Ignacio Zaragoza, en la alcaldía Iztapalapa, provocando un incendio de gran magnitud que dejó al menos 18 personas heridas. El estruendo y las llamas se extendieron rápidamente a varios vehículos que circulaban en la zona, lo que generó escenas de pánico entre automovilistas y transeúntes.
Los heridos, algunos con quemaduras de segundo y tercer grado, fueron trasladados a hospitales cercanos; cinco de ellos requirieron transporte aéreo en helicópteros de los Cóndores para recibir atención inmediata. En tanto, bomberos y cuerpos de emergencia trabajaron durante horas para sofocar las llamas y evitar una tragedia aún mayor.
El incidente paralizó la movilidad en la zona oriente de la capital: se cerraron carriles de la autopista México–Puebla, además de la suspensión temporal del servicio en estaciones del Metro, Trolebús y Cablebús. La jefa de Gobierno, Clara Brugada, acudió al sitio y confirmó que todas las víctimas están recibiendo atención médica, mientras se investigan las causas de la explosión.
Este siniestro, uno de los más graves registrados en la capital en lo que va del año, reaviva la discusión sobre las condiciones de seguridad en el transporte de combustibles y la vulnerabilidad de las vialidades más transitadas de la ciudad.